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| Fuente: Osasuna.es |
Las cesiones son un tema “controvertido”
entre la afición rojilla. Y lo digo entre comillas porque tampoco es algo que
centre todos los debates. Pero está ahí, es un aspecto del mercado que hay que
valorar. Todo el mundo queremos que la gente que llegue a Osasuna sea buena,
bonita y barata, si puede ser gratis mejor. Lógico, pero no siempre se alinean
los astros de la manera que lo hicieron cuando aterrizaron en Pamplona
jugadores como Milosevic o Delporte.
Cuando no existen medios
económicos suficientes para contratar al jugador deseado, la cesión es la vía
por la que se intenta incorporar. Préstamos por una temporada que llegan, a
priori, a aportar el máximo en un lapso de tiempo breve. Sin embargo, esta
pretensión no siempre se cumple. Muchos han sido los jugadores que han llegado
a Osasuna en calidad de cedidos en los últimos años, pero pocos han sido
realmente determinantes. Casos como los de Soldado o Raúl García han sido
aislados en el club rojillo, los futbolistas que han pasado sin pena ni gloria
o que han fracasado suman una cantidad más elevada.
No hace falta echar la vista
demasiado atrás para comprobarlo. Esta última temporada, sin ir más lejos, han
sido cuatro los cedidos: Oriol Riera, Digard, Rivière y Sirigu. Los tres
primeros llegaron en verano y el último en invierno. Los resultados hablan por
sí solos. Entre los dos arietes sumaron cuatro goles, anotados íntegramente por
Oriol. El francés Rivière no consiguió estrenarse. Digard empezó lesionado,
volvió a los terrenos de juego y duró partido y medio; ahí acabó su
participación. Salvatore Sirigu llegó con la vitola de portero internacional
absoluto con Italia, con numerosos partidos a sus espaldas (incluso de Champions
League), pero su rendimiento no fue mejor que el de Nauzet y Mario. Cuatro fracasos
que dejan el listón por los suelos.
Este verano, de los dos fichajes
que ya ha realizado Osasuna de manera oficial, uno de ellos es cedido. Se trata
de Sebas Coris, futbolista del Girona de 24 años que juega de extremo o
carrilero. La duda que se plantea con esta contratación es si su perfil es el
adecuado para llegar en préstamo. Según una encuesta realizada a nuestros
lectores, la gente prefiere que los cedidos en el equipo sean pocos y que den
un salto de calidad, o que sean los mínimos posible.
De ahí que salte la incertidumbre
en cuanto al gerundense. ¿De verdad es Sebas Coris ese jugador que puede dar un
salto de calidad al equipo? Yo lo desconozco, por eso lo planteo como duda. Pero
me parece cuestionable que un jugador al que le cuesta tanto acabar un partido
pueda ser tan determinante. Quizá pueda ser un revulsivo interesante y alguien
con una progresión potencial potente, en ese caso Osasuna podría haber
intentado hacer un esfuerzo para ficharlo en propiedad. Sólo el tiempo dirá si
esta cesión ha sido adecuada, pero queda claro que, si se pretende traer más
gente cedida, estos tienen que dar un salto potente de calidad, ser nombres más
contrastados e ilusionantes.
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